Macedonia del Norte: un cruce de culturas en el corazón de los Balcanes

Viajar a Macedonia del Norte es adentrarse en un país pequeño en tamaño, pero inmenso en historia y diversidad cultural.

9/21/2022

Entre montañas, lagos cristalinos y ciudades vibrantes, el viajero descubre un mosaico donde Oriente y Occidente se encuentran.

La capital, Skopie, sorprende al visitante con una mezcla de tradición y modernidad. En 2014 el gobierno lanzó el proyecto “Skopje 2014”, destinado a embellecer la ciudad y atraer al turismo internacional. El resultado fue la instalación de decenas de monumentos, fuentes y estatuas de personajes históricos, siendo la más imponente la colosal escultura ecuestre en la plaza principal, conocida como “Guerrero a caballo” (popularmente identificada con Alejandro Magno). Este proyecto transformó la estética urbana: hoy Skopie es un escenario ecléctico donde conviven edificios de estilo neoclásico con restos otomanos y bizantinos, generando un ambiente único, aunque también polémico por su costo y su impacto en la identidad cultural.

Fuera de la capital, el país guarda joyas de gran autenticidad. El lago Ohrid, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, deslumbra con sus aguas profundas y las iglesias medievales que lo rodean, como la famosa iglesia de San Juan en Kaneo, una postal inolvidable.

La historia de Macedonia del Norte se remonta a la Antigüedad, vinculada a Alejandro Magno, y pasó por influencias romanas, bizantinas y otomanas. Esa diversidad aún se percibe en su gastronomía, sus mercados y en la hospitalidad de su gente, que invita a compartir un café turco o un vino local.

Macedonia del Norte sigue siendo un destino auténtico, poco masificado, que mezcla cultura, naturaleza e historia viva. Un viaje aquí es mucho más que turismo: es una inmersión en el corazón de los Balcanes.